Flan de chocolate blanco

Es fantástico revisar el tiempo pasado a través de mis cuadernos de apuntes. Gracias a ellos me encuentro con alguna que otra delicia que tenía olvidada. Ya me gustaría a mí ser capaz de recordar todos los apuntes que tengo guardados.

¡Benditos cuadernos!

Un acierto total para cerrar una comida familiar o con amigos, y más cuando la comida ha sido… digamos… copiosa.

Los ingredientes:

Con medio litro de nata, 150g de chocolate blanco, 5 yemas de huevo y 100g de azúcar, he comprobado que te sale un flan de queso francamente rico y delicado.

La forma de prepararlo fácil no, para niños, aunque hoy por hoy hay niños que a muchos de nosotros, a mi por lo menos, nos dan sopitas con ondas. Bueno, que para no variar ya estoy empezando a perderme en otros menesteres.

Entre los ingredientes anteriores no está el azúcar que utilicé para caramelizar los moldes o molde, eso que cada uno lo calcule para el tipo de moldes que utilice.

Primero es calentar la nata hasta que esté a punto de hervir, momento justo para retirarla del fuego y derretir el chocolate. Reservo.

Las yemas y el azúcar bien mezclados y batidos. Ahora voy añadiendo la nota con el chocolate poco a poco y sin dejar de batir para que no cuaje y luego puedan encontrarse grumos. Si pasa, no hay ningún problema, se cuela la mezcla y listo. Yo lo hice a pesar de no tener ni un solo grumo, pero más vale prevenir…

Ya colada fui rellenando los moldes que coloque sobre una fuente de horno. Añadí el agua necesaria para hacerles su baño María, pero con cuidado de que no cayera ni una sola gota de agua dentro de las flaneras.

Tan solo falta ponerlas dentro del horno que estará a 170º. El tiempo como siempre dependerá del horno de cada uno, pero si es un solo flan, tardará más o menos unos 40 minutos. Estos al ser individuales pasaron algo más de la mitad, unos 20-25minutos.

Hacía tanto que no preparaba este postre que ya no recordaba lo cremoso, rico y suave que resulta y desde luego, nada empalagoso.

Espero que os guste.