¿La suerte existe o hay que buscarla? No sé, igual es que la suerte acompaña mis riesgos en la cocina. Lo que tengo claro es que en este caso sí lo ha hecho, que no la casualidad… ¡Uf! Creo que me estoy liando, lo que quiero decir es que para hacer esta tarta me arriesgué y gané.
Lo que importa es que al final la tarta estaba rica, rica de
verdad. La culpa fue de un trozo de masa dulce que ya utilicé para mi empanada
dulce de naranjas. Aquel día me sobró un buen trozo y la congelé. Me ha venido
genial para esta de hoy. Se ha descongelado perfectamente pero he querido
enriquecerla un poquito más con un buen trozo de mantequilla que le he añadido
a modo hojaldre.
Con ella he cubierto las paredes de un molde desmontable de 24
x 5cm. Pinché el fondo de la masa con un cubierto y luego puse un papel de horno y rellené con mis
garbanzos destinados a este menester. Metí el molde con la masa en el horno y
horneé a ciegas durante 20 minutos a 190º.
Para la crema:
- ½
litro de leche
- 3 yemas
- 80 g de azúcar (10 g más o menos según te guste el dulce)
- 3 yemas
- 2 cucharadas de harina de maíz
- una cuchara de mantequilla
- la piel de ½ limón
La leche al fuego con la piel de limón y caliento, mientras mezclo las yemas con el azúcar y la harina de maíz.
Cuando
la leche está caliente añado poco a poco a la mezcla, bato bien para que se
deshagan los grumos que puedan quedar. Hecho esto, lo pongo al fuego sin dejar
de remover para que no se pegue.
Cuando
empieza a espesar retiro del fuego (no debe hervir) y bato deprisa, añado la
mantequilla y lista.
La base de la tarta está estupenda, vuelco la crema
pastelera, aliso la superficie y reservo.
A por el arroz con leche, cada uno a su manera, pero yo
utilicé estas cantidades.
- 750ml
de leche entera
- 100g
de arroz
- La ralladura
de la cáscara de una naranja
- 4
vainas de cardamomo
- 1
palo de canela
- 175g
de azúcar
- 35g d
mantequilla
- 3 huevos XL
Puse todos los ingredientes, menos el azúcar y la
mantequilla, a cocer a fuego lento y removiendo casi continuamente hasta que el
arroz estaba prácticamente cocido. Por último añado el azúcar y la mantequilla y
otra vez, sin dejar de remover, dejo que el arroz llegue a su punto de cocción.
Retiro del fuego y dejo enfriar un poco.
Ahora bato los huevos, añado un poco del arroz templado,
mezclo bien y vuelco sobre el resto del arroz con leche. Remuevo hasta que está
perfectamente mezclado y con cuidado voy poniendo cucharadas sobre la crema
pastelera que ya estará completamente fría, de este modo no se mezclará y
quedarán dos capas perfectamente diferenciadas.
Listo para terminar de hacerse en el horno que estará ya a
180o, el tiempo como siempre dependerá de cada horno. Lo mejor
pinchar un poco y comprobar que no está crudo. Eso sí, no pinchar hasta el
fondo porque la crema puede engañarnos.
Retiro del horno y dejo enfriar completamente.
Ahora cubro toda la superficie de la tarta con una capa de
azúcar y caramelizo.
Y ya está, lista para servir y, sinceramente, si sois amantes
del arroz con leche, yo lo soy, creo que os va a enamorar.