Antes de nada diré que
todo parecido con la realidad de esta tarta, es pura coincidencia. Me explico.
En unos días la original, Marita, me ha enviado su receta por escrito y, diré que, diferencias… habelas, hailas :).
Hace unos días hice un
curso de manga pastelera de Wilton con Loleta de la tienda americana. Huelga
decir que fue fantástico, intenso, y que superó con creces mis expectativas.
Todo esto es para decir
que otra alumna, Marita, nos obsequió con una tarta durante el curso. Tarta
contundente, pero deliciosa, de ésas que si te dejas llevar no paras de comer un
trozo tras otro.
Y no sería yo si no
preguntara por los ingredientes y la forma de prepararla. Bueno no siempre me
atrevo a pedir las recetas de todo lo que me gusta, mi pudor se manifiesta más
veces de las que quisiera.
Contó que era una tarta
argentina, que la original se hacía con membrillo y coco, como no tenía utilizó
dulce de leche y almendra molida.
Aprovecho que aún me queda
membrillo casero, que he comprado coco rallado y... que la suerte me
acompañe...
... y si sale parecida me
doy por satisfecha.
Pasta flora:
- 300g de azúcar
- 2 yemas + un huevo entero
- 300g de harina más un
poco
- 2 cucharadas de leche
- Esencia de vainilla
- Ralladura de limón
Batir la mantequilla, que
estará a temperatura ambiente, y el azúcar hasta que este cremosa.
Añadir los huevos de uno
en uno y la leche.
Ahora la harina que
mezclo a mano con una espátula o cuchara de madera.
Ahora una capa de
membrillo o dulce de leche.
Turno para la cobertura:
- 100g de azúcar
- 1 huevo
- Coco rallado o almendra
molida, o los dos
Batimos todo y lo dejamos
listo para ocupar el puesto de última capa.
Sólo falta la sesión de
horno que estará a 180°.
Si se hace con membrillo,
como ésta, hay que guardar un poco de la pasta flora para hacer un enrejado
sobre el membrillo, pero a mí me apetecía mucho más la mezcla de azúcar y así
lo hice.
Ya lo dije al principio,
ni parecida. No viene al caso contar lo que ocurrió con la masa y estas
cantidades que había apuntado, no sé que falló, ni en qué me equivoqué, en algo
seguro…
Pero que la tarta, o como
se quiera llamar a esto, estaba rica, fue un hecho.