Este mes no hay país sólo hay "Cocina de Navidad" y es Teresa en su Casa Tere quien recibe nuestras propuestas.
Llevo un mes pensando y pensando… ¿Qué hago? ¿Qué preparo? ¿Qué comparto? En fin, que no terminaba de decidirme y ya empezaba a sentirme un poco agobiada porque se acercaba la fecha de publicación y yo seguía sin aclarar mis ideas, o mejor dicho, sin una idea.
Llevo un mes pensando y pensando… ¿Qué hago? ¿Qué preparo? ¿Qué comparto? En fin, que no terminaba de decidirme y ya empezaba a sentirme un poco agobiada porque se acercaba la fecha de publicación y yo seguía sin aclarar mis ideas, o mejor dicho, sin una idea.
Revisando mis
cuadernos manuscritos me encontré otra
vez con esta delicia, bueno, a mí al menos me lo parece ya que adoro los
milhojas, sean dulces o salados. No es
la primera vez que lo preparo y tampoco la primera vez que aparece en este
blog, pero la Navidad es buen momento
para rescatar este bocado.
Los ingredientes:
- 1 micuit
- 2 manzanas reinetas asadas
- 1 pera conferencia
- 1 trozo de queso de cabra (he
utilizado queso de Cebreiro)
- azúcar
Lo primero que hago es
forrar un molde cuadrado con plástico para facilitar el desmoldado y poder
apretar sin miedo al terminar el montaje.
El micuit debe estar
muy frío para facilitar el corte, cuanto más finas sean las lonchas más capas y
más suave será el resultado final, así como la capa de manzana asada tampoco
debe ser excesiva, lo justo para que no resulte empalagoso ni demasiado dulce.
Y sin más preámbulos
empieza el montaje. Cubrir el fondo del molde con una capa de manzana asada,
encima la capa de queso, no he puesto cantidad ya que dependerá un poco del
tamaño del molde que utilice cada uno, y esta será la única capa de queso que
lleve el plato. Encima la capa de micuit, capa de manzana capa de micuit, capa
de manzana...
La última, que puede
ser también de manzana, la he sustituido por una capa de pera cortada muy fina.
Es mejor colocarla sobre el micuit, se pegará mejor y facilitará el corte
posterior. Ahora cubro el molde con el plástico sobrante, aplasto con la mano
para encajar bien todos los ingredientes y lo reservo en el frigo un par de
horas.
Pasado el tiempo lo
saco del molde y lo corto en cuadraditos pequeños, mejor para un solo bocado pero pueden ser algo más grandes para tomar con cuchillo y tenedor .
Pongo sobre cada trocito una generosa cantidad de azúcar que caramelizo, pincho
cada uno con un palito de bambú y listo para comer.
El resultado es
delicioso, si os gusta el micuit claro, y es un entrante perfecto, aunque más
de un@ lo tomaría como plato principal.
Esta
es mi aportación a “Cocinas del mundo navideño”. Espero que os guste y me
alegraría que os sirviera de ayuda en la mesa de estas fiestas.
En enero repetimos anfitriona y estrenamos país.
Teresa y la letra P nos llevarán a...