Conozco mis limitaciones como escritora y por ello voy a ser muy breve en el porqué de esta tosta de hoy a la que he bautizado como “Tosta Moclín” ¿Por qué? Porque esta vez sí, esta vez la batalla es nuestra.
El 17 de Noviembre, con
una niebla y un frío importante, visité Pago de Valdecuevas, una finca situada
en un páramo a 850 metros sobre el nivel del mar. Una visita guiada por las instalaciones de la almazara, la
única almazara ubicada en la misma finca en toda la provincia de Valladolid.
Diré que el frío no impidió que disfrutáramos viendo
esa especie de Mazinger enorme recolectando las aceitunas ¡Impresionante!
No faltó esa cata para descubrir los secretos
de este fantástico Oro líquido vallisoletano.
Una curiosidad, el páramo donde se sitúa el olivar fue testigo de la batalla de Medina de Rioseco o Batalla de Moclín, el 14 de Julio de 1808, donde el General Joaquín Blake comandó las tropas españolas frente a las napoleónicas al inicio de la Guerra de Independencia, batalla que… por cierto… perdimos :(
Pues bien, en
agradecimiento a lo bien que nos trataron, he preparado una tosta para
disfrutar de ese maravilloso Aceite de Oliva Virgen Extra Pago de Valdecuevas, elaborado
con aceitunas de variedad arbequina, con
gran intensidad aromática y una mezcla de hierba verde y almendra.
Ingredientes:
- Pan de hogaza
- 200g de tomate rosa
- 130ml de Aceite de Oliva
Virgen Extra Pago de Valdecuevas
- Sal
- 1 diente de ajo
- Espárragos verdes
- 6 champiñones portobello
- Anchoas
- Jamón ibérico
Ingredientes sencillos,
dificultad inexistente y homenaje total a tan adorado líquido.
Lo que realmente importa
es la elaboración de la crema de tomate.
Pelo el tomate y le
quito todas las pepitas. Troceo y pongo en un vaso batidor junto con el aceite
y una pizca de sal. Coloco la batidora tocando el fondo del vaso, como si fuera
a hacer una mayonesa, y empiezo a batir sin levantar el brazo hasta que la
salsa empieza a ligar, que liga y de qué manera, crema pura. Reservo.
Mientras preparo los
espárragos, bien cortados en juliana. Salteo con un poco del mismo aceite y un
diente de ajo. Reservo.
Repito la misma
operación con los champiñones, pero estos cortados en láminas. Reservo.
Tan solo falta tostar el
pan a mi modo, bien pincelado con un poco más de aceite dejo que sobre la
plancha tome un poco de color ayudándole con una espátula bien colocada sobre él
y aplastando para que toda la superficie quede perfectamente tostada.
Solo falta el montaje. Cubro
toda la superficie del pan con una capa de mi crema-emulsión de tomate, encima
unos espárragos, coronando estos unas anchoas pa’ morirse y una yema de huevo frita.
En la otra,
prácticamente igual, los champiñones serán los dueños de esa cremosa superficie
y sobre ellos unas lascas de un delicioso jamón ibérico.
Tan solo queda rociar la
superficie con un hilillo de Aceite de Oliva Virgen Extra Pago de Valdecuevas ¿Hace falta más?
El Aceite de Oliva Virgen Extra Pago de Valdecuevas, ha sido
reconocido por la guía Flos Olei como uno de los mejores aceites del mercado.
También se ha alzado, entre otros, con la Medalla de Bronce en los Premios
Mario Solinas, la Medalla de Oro en los Premios CINVE 2015 y la Medalla de Oro
en el “New York International Olive Oil Competition”.