Hace unos días, al pedir mi fruta por teléfono, y decir… “no sé si me falta algo…”. Luis, el frutero, me respondió… “hay unos champiñones estupendos, son grandes pero buenísimos…” “Vale, mándame medio kilo…”.
Cuánta razón tenía, al verlos
pensé que eran espléndidos para rellenar. Decidir el relleno fue fácil, tenía
en casa esa maravillosa morcilla de autor que me traje de Burgos, “Ciego” así la llaman, aunque fue “morcillón”
como la denominó la señora que me contaba sus excelencias, y desde luego no
necesitó insistir mucho para que me llevara dos hermosos ejemplares de casi un
kilo cada una.
Como dice en su etiqueta, su imagen es muy característica ya que para su elaboración se utiliza el ciego, tripa natural de cerdo que tiene una punta cerrada o ciego.
Como dice en su etiqueta, su imagen es muy característica ya que para su elaboración se utiliza el ciego, tripa natural de cerdo que tiene una punta cerrada o ciego.
Ganadora de varios premios como
la mejor morcilla de arroz de Burgos, y ahora, después de probarla lo entiendo,
es sin duda la mejor morcilla de arroz del mundo mundial… de las que yo he
probado.
Ingredientes:
- 8 hermosos champiñones
- Morcilla de arroz
- Carne de manzanas
- 100ml de nata líquida
- Aceite + sal
Después de limpiar los
champiñones, que habría servido perfectamente para casita de fin de semana de
cualquier gnomo que se precie, retiré el pie de cada uno de ellos y los
reservé.
Los sombreros los coloqué en una
fuente de horno untada con un poco de aceite y con una pizca de sal, y los puse
a 180º durante 15 minutos. Pasado ese tiempo los pasé a una sartén amplia,
añadí un poco más de aceite y los cubrí con la tapa de una olla para que no se
escapara ningún aroma. Dejé que se hicieran a fuego mortecino otros 15 minutos
más.
En otra sartén, con un poco de
aceite freí la morcilla sin su “ciego” y después de escurrir el aceite que no
necesitaba para nada, la reservé.
Los tallos los piqué muy menudos
y los salteé con un poco de mantequilla. Añadí 200ml de nata líquida y dejé que
cociera todo junto unos minutos. Trituré bien para conseguir una salsa que me
serviría para napar los champiñones después de bien rellenos.
Todo listo para rellenar. Fuente
de horno con el fondo bien untado con aceite de oliva virgen extra. En el fondo
del champiñón, una cucharita de carne de manzana gallega (pretendí en su
momento hacer mermelada con las manzanas que me regaló Yoli). Encima, una
cantidad generosa de morcilla y por último, napar con la crema obtenida con sus
tallos.
Tan sólo queda el momento calor
del horno que estará a 180º y allí, hasta que estén bien calientes. No
necesitan más cocción, todo está hecho.
Para servirlos, he puesto en el
fondo un par de cucharadas de salmorejo, por encima un hilo de aceite y los
champiñones a ocupar su puesto.
Un acierto, sin duda, hacer
pareja con el salmorejo, porque ha quedado un aperitivo-entrada de lo más
aparente y desde luego rico.
Se ven deliciosos!!!
ResponderEliminarBesitos.
Mil gracias
EliminarMaestra, que eres una maestra. Perfecta ejecución y la presentación un lujo¡¡¡¡, Yo no soy muy morcillera pero tomo nota para un aperitivo que a mi familia les encanta.
ResponderEliminarBesitos
Concha
Yo si que soy morcillera y morcillona jejeje!!!
EliminarMuac muac
¿Entrante aparente? Perdona que te diga, pero de aparente, nada, porque no creo que sea una apariencia lo que yo veo al otro lado de la pantalla. Me ha encantado tu propuesta para rellenar unos simples champiñones. Es una seta que gusta en casa, y especialmente rellena y al horno, con lo cual, me has solucionado también una comida de un día de estos.
ResponderEliminarbesos y feliz comienzo de semana.
Gracias Yolanda, tus comentarios siempre son de lo más favorables, no sabes cuanto te lo agradezco.
EliminarBesos mil
Con este relleno unos sencillos champiñones se transforman en una maravilla con esta morcilla...
ResponderEliminar¡Qué ricos y qué vistosos!
Besos y feliz semana,
Palmira
Eso ha sido, la maravillosa morcilla, y no es broma. Si pasas por Burgos no dejes de probarla.
EliminarMil besos
Menos mal que me pillas cenada y con el café ya tomado, porque sino hubiese sido capaz de coger el coche y plantarme en tu casa. ¡Vaya pintaza que tienen!.
ResponderEliminarbss
Elena
Creo que congelé media docena... te los guardo ;)
EliminarBesazo
Combinación estupenda... y me ha parecido leer: "pedí mi fruta por teléfono"? Dónde? No me digas que tu frutero es como Chema el de "Aída" que te la sube a casa ¡¡¡yo quierooo!!!
ResponderEliminarBesos
Nieves
Madre mía que relleno, estos champiñones debieron de quedar suculentos
ResponderEliminarMuas